13.9.21

Obras Maestras al detalle. Museo del Prado y Johann Sebastian Bach.

 

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Pasión de Cristo es la denominación convencional utilizada para englobar los episodios evangélicos que narran los sucesos protagonizados por Jesucristo entre la última cena y su crucifixión y muerte el ciclo narrativo puede detenerse ahí —comprendiendo aproximadamente una noche y el día siguiente— o continuarse con su entierro y resurrección, al tercer día —el cómputo cronológico ha sido históricamente objeto de debate—. También es el tema más utilizado en el arte cristiano.

La palabra castellana "pasión" proviene de la latina passĭo, -ōnis,. Hace referencia a los sufrimientos de Cristo, entre los que se incluyen: la traición de uno de sus discípulos (Judas Iscariote) y la negación de otro (San Pedro), la oración del huerto (aceptación trágica de su destino mientras los apóstoles, dormidos, le dejaban solo en el Huerto de los Olivos —Getsemaní—), su prendimiento (tras ser señalado con el "beso de Judas" y renunciar a que sus discípulos le defendieran), su periplo judicial entre Anás, Caifás, Pilatos y Herodes (el juicio de Cristo, con sus interrogatorios y enigmáticas respuestas), en el transcurso del cual se producen diversos episodios de burlas y torturas a cargo de los soldados (Cristo en la columna, coronación de espinas, los llamados improperios), la presentación a la multitud (Ecce Homo), la alternativa presentada a elección popular (salvar a Cristo o a Barrabás), su condena a muerte con el "lavado de manos" de Pilatos, el Via Crucis (el camino, cargado con la cruz, atravesando Jerusalén —por la actualmente llamada Via Dolorosa— hasta el monte Calvario —Gólgota—, con varias caídas —debe ser ayudado por Simón de Cirene— y encuentros —con Verónica, que le seca el rostro, con su madre, con las mujeres de Jerusalén—), el expolio (ser despojado de sus ropas), y la crucifixión entre dos ladrones (Dimas y Gestas).

Son innumerables las obras de arte que representan episodios de la Pasión de Cristo, es un tema recurrente en el arte cristiano. Su representación puede adecuarse estrictamente a los límites propios del concepto "Pasión".

Entre los más representados que se encuentran en el Museo del Prado están:
01. Entrada de Cristo en Jerusalén. Anthony van Dyck
02. La última cena. Juan de Juanes
03. Lavatorio. Tintoretto
04. El Prendimiento. Francisco y Rodrigo de Osona
05. El Prendimiento de Cristo. Antonio Van Dick
06. Cristo de Gethsemaní. Carl Heinrich Bloch
07. La flagelación de Cristo. Anton Raphael Mengs
08. Cristo ante Pilatos. Giaquinto Corrado
09. Cristo a la Columna. Giandomenico Tiepolo
10. Coronación de espinas (La Flagelación). Juan Correa de Vivar
11. El Expolio de Cristo. Tiepolo Giandomenico
12. La Flagelación de Cristo. Giaquinto Corrado
13. Ecce Homo. Juan de Juanes

En este vídeo pueden ver los cuadros y fragmentos muy detallados.


La banda sonora del vídeo es, "La Coral venir hijas, ayúdame a quejarme", de la Pasión según San Mateo, BWV 244,  está  escrita para voces solistas, doble coro y doble orquesta por Johann Sebastian Bach. 

Se ha definido como el más rico y noble ejemplo de la historia de la música sacra.  Consta de dos grandes partes conformadas por 68 números. El texto del evangelio de San Mateo, capítulos 26 y 27, es cantado literalmente por un evangelista, y las personas de la trama (Cristo, Judas, Pedro, etc.) por los demás solistas. 
Alrededor del texto bíblico se agrupan coroscoralesrecitativos y arias con la intención de interpretar el texto. 

No se sabe con certeza si la Pasión según San Mateo fue compuesta en 1727 o 1729. Aunque se relaciona directamente con la música fúnebre para el príncipe Leopoldo de Anhalt-Cöthen, se desconoce si la cantata fúnebre sirvió como modelo para la pasión o si la pasión fue el modelo de la cantata.  Es la obra más extensa del compositor.
Gonzalo Díaz Arbolí

4 comentarios:

Eugenio Martínez dijo...

Considero muy interesante esta aclaratoria entrada, Gonzalo, que nos enmarca el tiempo y los hechos de la Pasión de Cristo, pormenorizado las circunstancias, cuando es oportuno, para limitar y definir los diferentes momentos de la misma y que, a su vez, han sido los motivos de inspiración para los innumerables pintores que nos inmortalizaron dichos pasajes. Y aquí te dejo mi agradecimiento por este blog tuyo, que nos ayuda a ampliar nuestra cultura

Unknown dijo...

Gracias

Flora Hurtado dijo...

Pues si, tienes razón, pero nos hemos acostumbrado tanto a sentir la Semana Santa. Como folclore....., Que tristeza, ya no se vive como hace años, cuando no podamos música, no podíamos cantar porque era una época de duelo y vivíamos le Semana Santa con total devoción, que tiempos!!!! Eran preciosos, salíamos de la Semana Santa con .muchos proyectos de mejora, luego si los cumplíamos......? Pero el deseo era ferviente. Echo de menos esa mentalidad...., Muchísimo que inocencia!!!!

Luis Manzrro Benitez dijo...

Me ha encantado ver esos maravillosos cuadros mientras escuchaba la Coral. Tu publicación me ha recordado lo asombrado que me quedé cuando vi por primera vez EL CRISTO, de Dalí.
Muchas gracias por toda la cultura que nos traes desde "tu rincón del arte"

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