19.12.24

Mevlana Jalal ad- Din Muhamad Rum. Este ilustre hombre del siglo XIII protagonizó la comprensión del amor como fuente de todo lo creado.

Deja que la belleza que amas, sea lo que haces”. 

Rumi 

El pasado miércoles, hablábamos en nuestra tertulia de la cultura árabe y surgió -por parte de José Luis- el tema del sabio y místico "Rumi". Tras una ardua investigación sobre asunto tan interesante, lo publicamos en el blog.


Jalál al-Dín Rümí, erudito islámico, teólogo maturidí y místico, una de las figuras más célebres del sufismo y uno de los más grandes maestros espirituales del Islam. Se le considera el mayor poeta místico musulmán y uno de los más grandes de toda la mística universal. Nació el 30 de septiembre de 1207 en Balj, en la actual Afganistán y murió en Konya (entonces parte del Sultanato de Rüm, de la dinastía de los turcos selyúcidas), el 17 de diciembre de 1273, razón por la cual se conmemora cada año el fallecimiento de este ilustre pensador y místico sufí del Islam en dicha ciudad de la Anatolia turca. Conocido popularmente como Rumí, que significa «originario de la Anatolia romana» ya que la Anatolia era denominada por los turcos selyúcidas como la «tierra de Rum (los romanos)», en referencia al Imperio romano de oriente más conocido como Imperio bizantino.

La importancia de Rumí trasciende lo puramente nacional y étnico: iranios, tayikos, turcos, griegos capadocios, pastunes, otros musulmanes de Asia central, así como musulmanes del subcontinente indio han apreciado enormemente su legado espiritual a lo largo de los últimos siete siglos. Después de su muerte, sus seguidores fundaron la orden sufí Mevleví, mejor conocidos como los «Derviches Giróvagos», ya que realizan una meditación en movimiento llamada «semá» donde hombres (y actualmente, mujeres) giran sobre sí mismos acompañados por flautas y tambores.


A través de los siglos ha tenido una significativa influencia en la literatura persa, urdú y turca. Sus poemas son diariamente leídos en los países de habla persa como Irán, Afganistán y Tayikistán y han sido ampliamente traducidos a varios idiomas alrededor del mundo. Rumi ha sido descrito como «el poeta más popular del mundo»​.
Las obras de Rumi están escritas principalmente en persa, pero usó ocasionalmente también el turco, árabe, y el griego capadocio​ en sus versos. Su poema Masnavi (Maznawi), escrito en Konya, es considerado uno de los más grandes poemas de la lengua persa.​ Sus obras son ampliamente leídas actualmente en su lengua original a lo largo del Gran Irán y el mundo de habla persa.Traducciones de sus obras son muy populares, de manera más notable en Turquía, Azerbaiyán, los Estados Unidos y el Sur de Asia. Su poesía ha influenciado no solo la literatura persa, sino también las tradiciones literarias de las lenguas turca otomana, chagatai, urdu, bengalí y pastún.

Sus textos son considerados obras fundamentales del sufismo. Sus poemas se han traducido a numerosos idiomas. En Estados Unidos de America, su obra, superior a cuatro mil versos y la reproducción de los mismos, se multiplica y disemina por el recibimiento tan apasionado de sus lectores, sobre todo desde de los años 60. Un interés que se mantiene vigente.

Página de un manuscrito de la obra de Mevlana (Rumi), datado en 1503.

El tema general de sus pensamientos, así como los de otros escritores sufíes, está esencialmente enfocada sobre el concepto de Tawheed (unidad) y la unión con su Amado (la fuente principal) de donde hemos sido cortados y del constante lamento por esta separación y su constante deseo de volver al "cañaveral" (la unidad):

               Escucha el ney, (flauta de caña): 
y la historia que cuenta,
cómo canta acerca de la separación:
Desde que me cortaron del cañaveral,
mi lamento ha hecho llorar a hombres y mujeres.
Deseo hallar un corazón desgarrado por la separación,
para hablarle del dolor del anhelo.
Todo el que se ha alejado de su origen,
añora el instante de la unión.
[...]
Cuando la rosa se haya ido y el jardín esté marchito,
no podrás escuchar más la canción del ruiseñor.
El Amado lo es todo; el amante apenas un velo.
El Amado está viviendo; el amante es una cosa muerta.
Ama las voluntades de lo que traen estas palabras.
[...]
Le pregunté al ney 
¿de qué te lamentas?
¿cómo puedes gemir sin poseer lengua?
El ney respondió:
Me han separado del cañaveral
y ya no puedo vivir sin gemir y lamentarme

Una de las razones del renombre de Rumi es que puede verbalizar el confuso mundo del crecimiento personal/espiritual y místico de una manera muy concisa y directa. Él no ofende a nadie e incluye a todos en sus textos. El mundo de Rumi no es ni exclusivamente el mundo de un sufí, ni el mundo de un hindú, ni un judío, ni un cristiano; es el estado más alto de un ser humano, un ser humano completamente desarrollado, no encasillado por limitaciones culturales; él toca a cada uno de nosotros.

Ven, ven, quienquiera que seas;
Seas infiel, idólatra o pagano, ven
Este no es un lugar de desesperación
Incluso si has roto tus votos cientos de veces, aún ven!

Las visiones, las palabras, y la vida de Rumi enseñan cómo alcanzar la paz y felicidad interna, para poder, finalmente, parar la corriente continua de la hostilidad y el odio y alcanzar la paz y armonía globales verdaderas.

¿Qué puedo hacer, oh creyentes?, pues no me reconozco a mí mismo.
No soy cristiano, ni judío, ni mago, ni musulmán.
No soy del Este, ni del Oeste, ni de la tierra, ni del mar.
No soy de la mina de la Naturaleza, ni de los cielos giratorios.
No soy de la tierra, ni del agua, ni del aire, ni del fuego.
No soy del empíreo, ni del polvo, ni de la existencia, ni de la entidad.

No soy de India, ni de China, ni de Bulgaria, ni de Grecia.
No soy del reino de Irak, ni del país de Jurasán.
No soy de este mundo, ni del próximo, ni del Paraíso, ni del Infierno.
No soy de Adán, ni de Eva, ni del Edén, ni de Rizwán.
Mi lugar es el sinlugar, mi señal es la sinseñal.
No tengo cuerpo ni alma, pues pertenezco al alma del Amado.
He desechado la dualidad, he visto que los dos mundos son uno;
Uno busco, Uno conozco, Uno veo, Uno llamo.
Estoy embriagado con la copa del Amor, los dos mundos han desaparecido de mi vida;
no tengo otra cosa que hacer más que el jolgorio y la jarana.


Los restos mortales de Rumi descansan en su santuario de Konya, que se ha convertido un sitio de peregrinación fervorosa que recibe fieles de distintas partes del mundo. Es el lugar donde sus seguidores crearon la Orden Mevlevi de los derviches (Patrimonio de la Humanidad UNESCO desde 2008).
La danza de los derviches tiene amplio reconocimiento como un tesoro cultural en el mundo musulmán, y también en el occidente. Los derviches de Konya, seguidores directos de Mevlana Rumi, pertenecen a la congregación más reconocida de Turquía, danzan cada semana para el público que se calcula en 2 millones de personas al año, además de hacerlo cinco veces por día, como ritual del rezo con el que buscan ser parte de dios.
En el día de su aniversario luctuoso, se celebra la ceremonia de los derviches sobre el propio sepulcro de Mevlana, el museo resguarda los manuscritos de los libros de Rumi, así como otros bienes, el más preciado es una reliquia sagrada: un pelo de la barba del profeta Mahoma.

Hacer clic sobre la imagen para visualizar el vídeo
Impresiona ver la belleza y el particular ritmo de esta danza,
y el dominio excepcional del equilibrio de estos Derviches.

Fuente: Maruchy Behmaras, Wikipedia,Youtube
Gonzalo Díaz-Arbolí

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sabía que el "Sufismo" es la rama más mística del Islam.
Pero no sabía que la había fundado Rumi, ni que su poesía fuera tan sencilla y atrayente. Tampoco sabía que sus monjes eran los "derviches".
Muchas gracias Gonzalo

Publicar un comentario