24.4.22

HOMENAJE A SALVADOR CORTÉS NUÑEZ, "El Chigüi". RETAZOS DE UNA BIOGRAFÍA

 


Palabras pronunciadas por el académico de Bellas Artes Santa Cecilia, Gonzalo Díaz Arbolí en el acto de homenaje a Salvador Cortés Núñez. 

Fue miembro de la Junta Directiva de la Academia desde el año 2008 hasta su prematura muerte en agosto de 2019; he de decir que mi elección fue por mérito a la amistad que nos unió durante más de 20 años.

RETAZOS BIOGRÁFICOS
Más conocido por “El Chigüi, amigo del peregil” su alter ego literario, nos contaba que, los que tienen apodo viven más porque la Muerte se confunde cuando viene a buscarlos, dudando de si el apodo corresponde o no al nombre de pila. Y mientras lo averigua, el gitano se escapa de morir.
Gitano audaz y valiente, tocado por la gracia y la curiosidad, igual hablaba de la teoría de la relatividad de Einstein como de los orígenes del pueblo gitano. Siempre magnificó las bondades con el mismo rigor que repudiaba la injusticia.


Buscador de sus ancestros, descarta su origen en los egiptanos a pesar de su parecido con Ramsés; se cree oriundo de la India pero se pierde en el laberinto de su búsqueda. Su avidez por aprender era tan fuerte como su espíritu de servicio. Que se leía hasta los anuncios para crecer en su inmensa cultura. Era poeta, escritor, buen conversador, educado y respetuoso sin par. Un personaje único e irrepetible.
Escribió 4 libros con esa sencillez y capacidad para crear historias y personajes prodigiosos.
Le caracterizó el temple que tan solo se alcanza en la fragua. Su alma gitana, andaluza y flamenca, de sangre universal corría por sus venas. Perteneció a la nobleza de la estirpe gitana. Descendiente de patriarcas de dos grandes sagas familiares: Los Cortés y los Núñez

¿Qué se puede decir de alguien que acumuló tantos méritos, que fue tan humano? tan discreto que siempre rehusó el protagonismo.
Se fue en silencio, pero su recuerdo y su obra permanecerán en nosotros para siempre.

En su memoria vamos a ver un vídeo con dos momentos de la entrevista que le hice en 2013 durante la presentación del libro “Un fantasma anda suelto por El Puerto” donde relata la anécdota del burro Liviano (me estremece la despedida, cuando Liviano vuelve la cabeza y lo mira y Salvador lo mira a él y los dos salen llorando) y el descubrimiento del Espíritu Arbolín.


No quiero terminar esta breve semblanza sin leer uno de sus poemas, Libertad, (La libertad es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos). Cervantes. 
Pertenece al poemario “Alma gitana” Ya la portada nos indica con la bandera (azul y verde y la rueda) el resumen de una fructífera vida en defensa de sus orígenes. Firma “Yo el
Chigüi, amigo del Peregil” y ¿quién es ese amigo? el Dr. Juan Pérez Gil, único en su especie, así consta en la dedicatoria de uno de sus libros: un personaje fruto de su prodigiosa imaginación. El libro es un canto a la amistad.

Un río para lavarme
un jato para dormir
un puente para taparme
y un campo para vivir.

Un camino y una senda,
un puerto donde llegar,
y en el corazón del viento
un sueño de libertad.

Gitano libre soy,
es mi destino el andar,
y en el camino desgrano
 el alma de mi cantar.

Sinsabores y desgracias,
persecuciones y huidas,
me van siguiendo los pasos
y cerrando mis heridas.

Encuero y descalzo vivo,
pero nunca miro atrás,
llevo en las manos grandeza
y en el alma libertad.


Quiero terminar recordando a Salvador con los últimos versos del poema “Elegía”, pero antes: me dan ganas de gritar con Miguel Hernández:

¡No perdono a la muerte enamorada!
¡no perdono a la vida desatenta!
¡no perdono a la tierra ni a la nada!

Ahora sí, SALVADOR, los últimos versos para ti:

Tu corazón, ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorado.
A las aladas almas de las rosas...
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
amigo del alma, compañero.

Sé que sus hijos son los responsables de mi participación en este homenaje y se lo agradezco de corazón, porque me han dado la oportunidad de expresar mi cariño y admiración por una de las personas más cabal y honrada que he conocido en este mundo intangible donde viven las almas generosas capaces de ayudar a los vivos.


Comentábamos, no hace mucho, el filósofo y poeta Eugenio Martínez sobre nuestro querido primo Salvador y me decía:
Por supuesto que el Chigüi tenía alma de poeta y una exquisita sensibilidad, pero lo que más me impresionó de él era ese duende que le daba una personalidad singular y una grandeza de espíritu inconmensurable, porque el duende convivía con él, ese misterioso espíritu "arbolín" que lo llevaba y lo traía, a veces aplaudiéndole y otras reprimiéndole, pero él siempre se movía al ritmo de alguien que le iba diseñando su camino. Yo pretendí en algún momento (iluso de mí) que me abriera alguna ventana de su singular morada, pero la respuesta siempre fue una envolvente y compasiva mirada que me decía, sin palabras, que sus moradas no las podía compartir con nadie.

Eugenio quiere entregar a la familia de Salvador su último poemario “Desde la caverna sin distancia” con la dedicatoria que le escribiera, demorado en el tiempo por su inesperado y definitivo sueño. Ahora ya goza en la nueva tierra de vides y de aromas.


VIDEOS E IMÁGENES DEL ACTO

Así comenzaba su intervención, la moderadora, M. Teresa Guijarro.
Buenos días, bienvenidos a todos al Homenaje de D. Salvador Cortés Núñez “El Chigüi”.
Gelem,  gelem, Hemos sido, hemos sido" que mejor manera de comenzar con el Himno Internacional Gitano en este homenaje a Salvador Cortés Núñez, cantado por  Noelia de los Ríos, acompañada al piano por Simón García Núñez.

Este vídeo son 2 cortes de vídeos realizado por aficionados. El primero: la interpretación Himno Internacional Gitano,  el segundo corte, su nieta Samara Puerto Cortés recita el poema de su abuelo: La Bandera Gitana. le acompaña a la guitarra, Manuel Campos.

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GALERÍA DE FOTOS.  Pulsar imagen para ampliar












2 comentarios:

Julio dijo...

Gonzalo, muy emotivo el homenaje que haces a Salvador "El Chigüi".
Tuve la gran suerte de conocerlo en la Tertulia de los Cántaros. Era un hombre bueno e interesante, al que la vida le llevó por diferentes mundos, incluído el de "arbolín"...y sé que quería muchísimo a su familia y a sus amigos y ellos a él.
Siempre tenía "su punto de vista" y entre los que hacen progresar a la humanidad, están los que se cuestionan las cosas...
El haber conocido a Salvador, ha sido una suerte para mí.

Anónimo dijo...

Gonzalo nadie mejor que tú podría hablar y describir a Salvador, compañero de aventuras y andaduras, cómplice de sus conversaciones, dudas y tertulias.

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