27.7.21

PATRIMONIO MUSICAL: REVISTA MUSICAL. MAITETXU MÍA.

 Maitetxu mía, 1927

Aunque no se trata de una Zarzuela, este sortxico (canción popular vasca), la colocamos hoy para nuestros amigos y amigas, por su extraordinaria belleza. Es una canción sentimental y tierna con una curiosa historia. Quienes escuchen 'Maitetxu mía' especialmente los migrantes, no pueden evitar sentir una profunda e intensa emoción y recordar con nostalgia el terruño, el lugar donde pertenece su alma, donde la luz y el corazón trazaron las coordenadas de la dicha. 
Se asocia al país vasco y Navarra por la variante euskérica más común del nombre Maite, aunque también es muy popular en el resto de España.

Breve biografía del compositor
Francisco Alonso López (Granada, 9-5-1887- Madrid 18-5-1948).  Su música es graciosa, alegre, de fácil melodía y acento popular. Destacaba en los pasodobles y chotis a los que imprimía garbo y desenfado. Muchas de sus obras continúan siendo muy apreciadas, como el pasacalle Los nardos, el chotis, El Pichi, ambas de la Revista Musical, Las Leandras.
Escribió igualmente dos pasodobles para las fiestas de la ciudad de Alicante, "Les Fogueres de Sant Joan", titulados La festa del poble, que se estrenó en 1934, y La Nit de San Joan, pasodoble foguerer para banda, coro y bajo solista y la canción Maitetxu mía. Llegó a presidir la Sociedad General de Autores de España.

El Maestro Alonso, en sus estancias en Fuenterrabía captó el sentir de las gentes de los caseríos y pueblos vascongados y llevarlos a sus pentagramas, creando una de las canciones más populares y célebres de su repertorio. Tan célebre, que siendo su compositor andaluz supo captar el espíritu vasco y hoy día podemos decir que no tiene patria.

Maitetxu mía ha sido interpretada y grabada por los más eminentes tenores de habla hispana, como Miguel Fleta, Juan García, Plácido Domingo, Alfredo Kraus, José Carreras, Luis Mariano y por grupos populares como Los Xeys, Mocedades y otros.

El origen de Maitetxu mía está en una apuesta. En Fuenterrabía, unos amigos vascos le juzgaban incapaz de componer música vasca. El Maestro Alonso, picado en su orgullo, pidió a su amigo y colaborador Emilio González del Castillo una letra de ambiente vasco para ponerla música. Cuando la tuvo, el compositor granadino se sentó al piano y, en sólo una hora, creó esta impresionante y maravillosa canción. 


         La interpretan de forma magistral Plácido Domingo y el grupo Mocedades.

Buscando hacer fortuna como emigrante
Se fue a otras tierras
Y entre las mozas una
Quedó llorando por su querer
Vuélvete al caserío
No llores más mujer
Que dentro de unos años
Muy rico he de volver
Y si me esperas
Lo que tú quieras
De mí conseguirás
Maitechu mía
Maitechu mía
Calla y no llores más
Yo volveré a quererte con toda el alma Maitechu mía
Y volveré a cantar sortxicos al pasar
Y volveré a decirte las mismas cosas que te decía
Por oro cruzo el mar
Y debes esperar
Luchó por el dinero
Y al verse rico volvió por ella
Saltó a tierra el primero
Porque soñaba con su querer
Ya llego al caserío
Voy a volverla a ver
No sale a recibirme
¿Qué es lo que pudo ser?
Murió llorando y suspirando

Si la han leído o escuchado con atención, el  dolor es tal que se propone quitarse la vida. 

El título emplea la palabra vasca 'maitetxu' -escrita a la española- con un posesivo, de modo que viene a significar, 'amor mío'. No quiere decir 'Maite mía', pues maitechu no es diminutivo de María Teresa ni equivale a Maite o Mari Tere, Suenan igual 'maite' y Maite por pura coincidencia.  
Txu en euskera es un diminutivo cariñoso. que se añade a los nombres propios.

Con esta canción recordaré eternamente a un amor lejano en el tiempo...... al primer amor.     
 
Gonzalo Díaz-Arbolí

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Eugenio Martinez Orejas
La ternura, el sentimiento y la emoción de este zortzico nos ha sumergido siempre a todos en una dulce nostalgia, que se repetirá, sin perder intensidad, cada vez que la escuchemos

Anónimo dijo...

Luis Manzorro Benítez
¡Que maravilla! La he escuchado muchas veces y siempre me emociona.
¡Gracias Gonzalo!

Publicar un comentario